Mi hijo muerde!

Esta semana he tenido que enfrentarme a dos situaciones muy incómodas con mi pequeñin. Aunque a mi me parezca la cosa más dulce e inocente del mundo...para otras personas es un pequeño dinosaurio que va dejando marcas a todas sus "presas".



¿Por qué muerde?

Ha sucedido alguna que otra vez en casa...y otras dos veces en el cole. Las cuidadoras del comedor se me "avalanchan" encima cual bola gigante de nieve cayendo desde la punta del mismísimo Everest de la que no tengo ninguna escapatoria.

Entiendo que estas señoras tienen que soportar a las madres de los niños mordidos: "para que estáis si no véis lo que le hacen a mi hijo" "es vuestro trabajo" "para que les pagan"... Yo tuve que enfrentarme a una de las madres en cuestión para pedirle disculpas y, entre dientes, me dio una especie de "ultimátum" diciéndome que no pasaba nada porque era la primera vez.... no quiero saber que pasará a la segunda! (jaja). Me ha tocado decirle muy educadamente que le diga a su niña que se mantenga alejada de mi pequeño mordedor.  

Pues por lo visto ha mordido a una niña y un niño sin motivo aparente. Yo se que mi peque aún no puede comunicarse muy bien porque no ha aprendido a hablar del todo mientras que todos los compis del cole hablan casi perfecto... y he comprobado que cuando ve alguna situación injusta o molesta MUERDE. 

Con sus mordiscos demuestra sus necesidades, deseos, sentimientos, frustraciones y agobio. Las personas más "tradicionales" me dicen que debo sentarlo en la silla de pensar (que, OJO: alegan que no es castigarlo... y yo me pregunto: poner a un niño sentado en contra de su voluntad en un lugar apartado prohibiendole jugar no es un CASTIGO?)




Los expertos indican que los castigos causan resentimiento que, con el tiempo, pueden hacer que el niño siga con comportamientos inadecuados.



He estado informandome y leyendo al respecto y os cuento lo que he sacado en claro por si alguna está en una situación similar y váis a por vuestro peque al cole o a la guarde temiendo lo peor:


1. Para detectar cuál es el MOTIVO por el que tu peque muerde presta atención: ¿cuándo y por qué muerde? ¿Es cuando juega con otros niños? ¿Muerde cuando otro niño le quita un juguete? ¿Sucede cuando otros niños lo agobian?
2. Intenta no perderlo de vista cuando está con otros niños y tú estás con él. Tu presencia le dará seguridad y podrás intervenir rápidamente. Además, si ves que las emociones de tu hijo están subiendo de nivel, puedes llamar su atención a otra actividad antes de que llegue al estado de "perreta" del que acaban saliendo quedándose dormidos del estrés. 

3. Si ha mordido, a pesar de nuestros esfuerzos, lo aconsejable es mantenerse tranquilo y no castigar al niño. Asegúrate de que ambos niños están bien y aparta a tu hijo para explicarle de forma calmada que lo que acaba de hacer no está bien. Los niños, por muy pequeñines que parezcan, saben perfectamente que lo que han hecho no es lo correcto. 
4.  Explícale para qué sirve morder. Cuéntale que se muerden los alimentos, no a las personas y cuando resuelva una de esas situaciones sin morder alaba su conducta todo lo que puedas.
5. Lo más importante es mantener la calma, no gritarle ni pegarle. Nos debemos poner en el lugar de los niños y ser conscientes de que en muchas ocasiones el no poder expresar sus sentimientos deriva en este tipo de impulsos.

Y para finalizar que no te de vergüenza pedir consejo a profesionales si no puedes solucionar la situación...como dice mi madre "no conozco ningún niño que llegue a los 15 años y siga mordiendo"... así que tarde o temprano se le pasará.

Feliz domingo!

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